Por fin he logrado salir de la caja. No me pregunten qué tal me ha ido porque he vivido experiencias espeluznantes que es mejor no tener que contar… lo importante es que he salido.
Y ahora qué?... ya tengo la casa más o menos montada. Tengo una nevera que fabrica hielo por todas partes menos en donde debe hacerlo. Un calentador de gas que da agua muy muy caliente enseguida pero que a los cinco minutos se apaga dejándome ya un par de veces enjabonado, en pelotas, muerto de frio y jurando en arameo. Y también tengo una lavadora que aún no me han traído, por lo que tengo un gran cesto de la ropa a puntito a puntito de reventar y un extraño tufillo que me acompaña.
Tengo como toda casa que se precie un buen y cómodo sofá con una mesa donde poner los pies y ya he comenzado a traerme una o dos de mis queridas plantitas. Las plantas hay que tratarlas con mimo ya que no son nómadas que podamos mover un día sí y otro también. Lo que peor lleva una planta es que la movamos y le demos guerra así que donde la pongáis dejadle un tiempo para que se aclimate.
Cualquiera que haya estado en alguna de mis casas sabrá que soy peor aún que la ratita presumida y en seguida la pongo lustrosa y ordenadita…. Hay quien duda de mi masculinidad, no sin motivo, cuando ve las plantitas, las velitas o algún cuenco con popurrí.
Si bien no es el tema de hoy algún día os explicaré, como ya hiciera con aquellos primeros “Culturillas” el concepto de Acción/reacción. Acción: tener la casa niquelada y popurrí de frutas del bosque. Reacción: las chatis te consideran sensible a la par que masculino y follas mucho…. En teoría ese es el principio, en la práctica sigo intentándolo.
Pero como he dicho el tema de la conquista no toca hoy de manera directa, si bien el otro día una que lee, opina pero nunca escribe, me dio la interesante idea y caerán unas líneas, fijo que caerán. El tema de hoy tiene que ver con lo que echo de menos, a día de hoy, en mi nueva guarida, una Video Consola.
La consola de videojuegos pueden ser de dos tipos: consola para hombres y consola para mujeres (no confundir con ConsolaDor que es otra cosa y un chiste demasiado facil) La consola para mujeres es aquella que tiene juegos de gimnasia, karaoke o saltar y brincar mientras cuidas una mascota. La consola para hombres tiene un único juego que se repite con diferentes títulos pero que sólo consiste en una cosa, AGREDIR Y DESTRUIR!!!
Si lo reduzco todo a estos dos conceptos es por una sencilla razón, el juego que nos gusta a los hombres es sólo ese. Puedes llamarlo Halo, Kill Zone, Resident Evil, Gears of War o Fifa world player que todos se reducen a eso. Ya tendré a alguien pensando que los juegos de deportes no consisten en matar y destruir, pero quiero recordarles que esos juegos sólo tienen gracia si lo que hacemos es vencer, machacar y destruir a un amigo. Eso sí, en los juegos deportivos el acto de destrucción se suele realizar en grupo. Una jauría acaba con la autoestima de otra. El empate no es una opción porque no habría vencedores y vencidos, como ya se dijo en la única película buena de Christopher Lambert “Sólo puede quedar uno”
Tengo una carencia en mi casa, y es que aún no hay consola. Pretendo arreglarlo cuanto antes ya que eso, y no el popurrí, sí hace que me plantee mi heterosexualidad y desde luego no pienso poner la Wii. Llamadme antiguo, pero no me veo dando saltos con la tabla de ejercicios Wifit ni cantando en un karaoke canciones de películas. Cuando me veo de mayor me imagino formando parte de un comando de élite estelar en medio de una guerra contra una violenta raza alienígena, con un enorme fusil en mis manos, clara metáfora de mi pene, matando sin piedad a todo bicho que se cruce delante de mi.
Mi hermano, que a pesar de ser menor que yo, es sin duda más listo, me dijo el otro día que la consola ideal era la Play Station, ya que tiene juegos de destrucción pero sobre todo porque tiene el Sing Star, un juego en el que cantas karaoke. Es gay tu hermano? Se preguntarán ustedes… pues no!, pero según su teoría un piso de soltero con el Sing Star instalado es un imán para las chatis. Algo así como una trampa para moscas pero más grandes. Dicho de otro modo, ya puedes encender velas por toda la casa y poner cien platos con popurrí que si el vecino tiene el Sing Star la única mujer que entrará en tu casa es tu madre…. Y ni siquiera puede uno asegurarlo.
Me encuentro pues en la segunda semana de esta nueva era con un tremendo dilema. Qué consola comprarme??? Me decanto por la destrucción que hará de mi vida un lugar más hermoso confiando en que el popurrí, el incienso y las velas hagan su trabajo? O… me doy al Sing Star y a la tabla de ejercicios de la Wii que según un experto en mujeres nunca falla y tonifica los músculos???
El dilema es tremendo y requiero de su ayuda. Si alguien tiene un estudio científico publicado en la revista Science que aclare el tema o simplemente sabe de alguien que tenga un primo que tenga un amigo que un día se compro el Sing Star y su vida cambió…. Háganmelo saber, es necesario que termine con este sin vivir.
Ahí queda la cosa, acuérdense de sonreír mucho que rejuvenece el alma y como dice el viejo del anuncio de coca cola, sean felices que la vida es corta para hacer otras cosas.
PD: A la madre que me parió que me lee siempre y anda en cama le mando el mayor de mis besos y a ustedes les juro que ella hizo lo que pudo, pero yo salí así.